Hoy, me he dado cuenta que la técnica es bien sencilla: primero, hacernos creer que no somos nada, que no valemos nada, que no llegaremos a nada, que no cambiaremos nada, que no influiremos en nada, que no comenzaremos nada, que no terminaremos nada. Después, sembrar la certeza de que las únicas soluciones posibles a nuestra falta de todo y nuestro exceso de nada están en sus manos. Finalmente, tirarnos migas de pan duro a las que nos lanzaremos con extrema necesidad e impotencia, compitiendo entre nosotros, destrozándonos, pisándonos en nombre de la supervivencia.
No nos están ganando ellos. Estamos dejándonos ganar nosotros al creer en sus palabras.
(By Franborg)
Que foto más cruel pero tan adecuada para tus pensamientos… En casí todas las situaciones de la vida tenemos que tener presentes que somos nosotr@s los sujetos y no los objetos, así que somos nosotr@s l@s que tenemos que cambiar las cosas